Termina una vez más un ciclo cronológico para nuestras vidas personales y profesionales, que espero nos haya dejado enseñanzas; ya que en última instancia, la vida es un continuo proceso de aprendizaje.
La temporada invernal es una oportunidad para hacer una introspección y análisis sobre los acontecimientos del último año. Sobre todo, porque durante el mismo, llevamos una carrera acelerada contra reloj que nos impone su tiempo y consume el nuestro, sin importarle nuestros planes.